La derrota de la Real Sociedad en un mal derbi trajo cola. Al enfado de la afición realista se suma el malestar cruzado que los principales exponentes de la actual Real, su técnico, Imanol Alguacil, y su capitán, Mikel Oyarzabal, mostraron en público.
Ninguno de los dos se mordió mucho la lengua en sus declaraciones a la prensa tras el choque de San Mamés. El primero, porque reconoció sin ambages que con la primera media hora de sus pupilos hubiera cambiado de golpe a los once futbolistas. El segundo, por la velada crítica que hizo al técnico de Orio tras la cuarta derrota consecutiva en San Mamés ante un rival de versión mediocre, pero suficiente para la victoria.
"Llevamos cuatro años que vemos que las cosas nos están costando mucho, que no estamos siendo nosotros mismos e igual hay que echarle un ojo desde el inicio, de cómo lo planteamos, de cuál es la idea que tenemos desde dentro e intentar hacer todos autocrítica", señaló Oyarzabal a preguntas de los periodistas, ante quienes tampoco quiso esconder la responsabilidad de que "en el campo nosotros también ser conscientes de que al final los que estamos ahí somos nosotros".
"Somos nosotros los que sacamos las castañas del fuego o cuando las cosas no van bien, pero llevamos muchos años aquí, no sé si con el mismo error o de la misma manera, y creo que hay que mirar todo el mundo hacia adentro e intentar hacer cada uno autocrítica en lo suyo", ahondó Oyarzabal en su carga de profundidad sobre un choque que se definió por un error defensivo de Javi López en el minuto 26.
"Hubiera quitado a los once"
Poco antes, a Imanol le habían cuestionado por los cambios de Take Kubo y Ander Barrenetxea, cuando ya en la segunda parte parecía que por las bandas empezaban a gozar de continuidad y peligro. El entrenador oriotarra no se anduvo con rodeos y, más allá del donostiarra y del japonés, aseguró que "ningún jugador de la Real ha hecho un partido brillante y si hubiera podido quitar a los once, hubiera quitado a los once".
"El Athletic, superior, mejor, y nada que decir. No ha sido un derbi muy diferente a otros muchos. No ha sido un derbi vistoso, ha habido pocas ocasiones. No me ha gustado para nada el equipo en los primeros 25 minutos porque no hemos venido a jugar el derbi ni con balón ni sin balón. Con 1-0 lo intentamos y se igualó el partido. Pocas ocasiones y mucha intensidad".
Recincidentes
No es la primera vez que el fracaso en el derbi levanta ampollas. En el 4-0, Martin Zubimendi, con cara de pocos amigos, fue sincero a la hora de analizar lo sucedido en San Mamés: "No es la primera vez que nos pasa esto. Dentro de nuestro estilo no hemos estado del todo lo finos que nos gusta, pero hemos logrado aguantar el resultado. En la segunda parte lo que no puede ser es que cuando encajamos un gol nos dejemos llevar y pase lo que ha pasado. No podemos encajar a balón parado. En un partido tan disputado, no podemos conceder estos goles. A raíz de eso nos hemos volcado al ataque de mala manera y a la contra nos han hecho daño".
Imanol se tomó muy mal estas declaraciones y tuvo un cara a cara con el jugador, al que le reprochó su mensaje, que lanzó, como el mismo dijo, porque nunca había perdido de tanta diferencia contra el eterno rival. Zubimendi confiaba en que no les afectara en la eliminatoria ante el Leipzig, cuya vuelta iban a disputar entre semana: "Obviamente que nos va a hacer mella, pero creo que ya nos ha pasado durante la temporada, nos hemos vuelto a reponer en varias ocasiones y pienso que esta vez en Europa va a ser más de lo mismo".
Fue una pena, porque la Real no recuperó a Mikel Merino, que tuvo que abandonar el campo bilbaino cuando en el marcador todavía reinaba el 0-0, o lo que es lo mismo, antes de que llegaran los cuatro goles. Sin embargo, las otras dos derrotas seguidas al otro lado de la A-8 se produjeron sin ninguna influencia de otras competiciones como la Copa, la Europa League o la Champions. En el último derbi lo único que ha trastocado la preparación fue el envite que le impusieron 72 horas antes en Alicante ante el Jove, lo que motivó que Imanol solo dispusiera de una sesión para preparar el duelo con toda la plantilla.
La reprimenda de David Silva
Dicen que en una de las derrotas, en el descanso, David Silva entró al vestuario muy enojado y reprochando al equipo por qué no golpeaban en largo, ya que estaban perdiendo continuamente el balón en posiciones avanzadas, lo que estaba provocando que llegaran la mayoría de las ocasiones rojiblancas...
Las derrotas en Bilbao siempre han escocido y han sentado mal en el vestuario. Por eso a veces alguno de los protagonistas no ha podido contener su enfado y ha realizado declaraciones que en el momento han sonado fuertes, pero la realidad es que la relación entre el entrenador y la plantilla goza de muy buena salud. Y entre el capitán y el oriotarra la confianza es máxima: "Estamos encantados de tenerle como entrenador, cada fin de semana nos sorprende tácticamente", declaró hace poco Oyarzabal. "Mikel es el mejor jugador que puede tener la Real", aseguró el técnico. Aunque la derrota en el derbi no es una más, el agua no llegó al río. Y lo que pasa en la zona mixta de San Mamés, se queda allí. El jueves llega el Ajax.