Una hoja de ruta exigente

Sin apenas margen de tiempo para lamentarse de los errores de la última derrota en territorio castellonense, el Deportivo Alavés afronta ante el Lugo una nueva final anticipada en su lucha por el ascenso. De hecho, la visita del cuadro gallego a Mendizorroza será la primera de las últimas doce jornadas que le restan al Glorioso para conseguir su ansiada plaza en la máxima categoría. 

Después de superar más de la mitad del curso, no son más que 36 puntos los que quedan en juego para las escuadras que militan en la categoría de plata. En la recta final del campeonato doméstico, el conjunto de Luis García se medirá tanto a equipos que ocupan la zona baja de la clasificación como a los auténticos cocos de la categoría, quienes calibrarán el poderío babazorro. No en vano, si el Alavés quiere llegar a las últimas semanas de liga con posibilidades de ascender, las matemáticas pasan por no perdonar en las jornadas venideras. 

Si bien es cierto que durante las comparecencias de prensa el técnico babazorro ha recalcado la complejidad de la categoría de plata, la realidad es que el Alavés, a priori, tendrá dos jornadas propicias para levantar el ánimo. El Lugo, colista en Segunda y que en los últimos días movió ficha en su banquillo para buscar un cambio de dinámica, es el rival a batir en esta semana para el Glorioso, que no debe fallar si desea mantener viva su candidatura al ascenso. Después de medirse al conjunto lucense, los vitorianos viajarán a Ponferrada para medirse a otro equipo inmerso en la zona roja clasificatoria y al que ya venció durante la primera vuelta. 

Una semana después de la visita a El Toralín, el conjunto vitoriano recibirá en casa al Tenerife, rival con el que cayó de manera estrepitosa y que ocupa la zona media de la clasificación, con un margen de ocho puntos respecto a la permanencia y 13 a los puestos de play off. Tras un mes de abril con los duelos ante escuadras alejadas del descenso y de la zona noble como el Andorra, Sporting, Huesca y Leganés, los de Luis García afrontarán unas últimas cinco jornadas de vértigo.

Final de alto voltaje

El mes de mayo apunta a ser frenético para el conjunto del Paseo de Cervantes, que debería llegar a las últimas semanas de campeonato con su candidatura todavía vigente. No obstante, las últimas cinco jornadas serán ante el Levante, Granada, Albacete, Málaga y Las Palmas, rivales a los que el Glorioso no pudo superar durante la primera vuelta. El primero de esa infernal maratón será ante un Levante que superó al cuadro vitoriano en todas y cada una de las facetas del juego. Reforzado tras la llegada de Calleja y con una plantilla diferencial en Segunda División, el cuadro levantinista es uno de los firmes aspirantes a regresar a la élite.

Después de visitar el Ciutat de Valencia, un estadio de infame recuerdo para la afición albiazul, el Glorioso recibirá en casa al Granada. Un duelo que está destinado a ser de alta tensión debido a la forma en la que el conjunto de Luis García fue derrotado en la primera vuelta. El conjunto nazarí, que no mantiene la fiabilidad del Nuevo los Cármenes en sus compromisos como visitante, es uno de los rivales a batir para los vitorianos. 

La antepenúltima jornada medirá al Alavés con el Albacete, la sensación más positiva del curso en la categoría de plata. Pese a ser un recién ascendido a Segunda, el conjunto manchego ha encontrado la fórmula para competir ante los más poderosos del torneo y es un rival muy incómodo. De hecho, en la primera vuelta, el Glorioso fue incapaz de derribar en Mendizorroza el férreo muro que estableció el ‘Queso Mecánico’.

La penúltima jornada estará protagonizada por la llegada del Málaga al estadio babazorro. El conjunto andaluz, inmerso en una crisis institucional y deportiva, ocupa actualmente la vigésima plaza en la tabla y está a diez puntos de la permanencia. El cuadro boquerón necesita obrar un milagro para mantener la categoría y podría llegar a esa fecha sin ninguna aspiración clasificatoria.

Y la guinda del pastel para el Glorioso en el tramo final del campeonato se encuentra en el Estadio de Gran Canaria. Allí, en la última jornada, se enfrentará a un Las Palmas que durante el presente curso se ha afianzado con puño de hierro entre los primeros clasificados. Repleto de futbolistas de primerísimo nivel, el cuadro canario es, sin duda, un firme candidato para lograr el ascenso a Primera.