Una mujer de 38 años murió en la noche del pasado viernes tras haber sido mordida en su casa por un hámster que tenía de mascota. La víctima se desplomó y falleció a pocos metros de las puertas del centro de salud Carinyera de Villarreal (Castellón), al que acudió junto a sus dos hijos tras sufrir el ataque del roedor.
Según el diario Mediterráneo, la mujer llegó por su propio pie a las instalaciones sanitarias sobre las 22:30 horas y junto a los menores, una joven de 17 años y un niño de 11. Tras desvanecerse los sanitarios del centro intentaron reanimarla, pero no pudieron hacer nada por su vida.
Aunque por el momento se desconocen los resultados de la autopsia, fuentes consultadas por Radio Castellón afirman que la principal hipótesis de la muerte es un shock anafiláctico por una reacción alérgica a los hámsteres tras el mordisco del roedor.