Todavía resuena el gol de Suçic en Anoeta. El zurriagazo del croata desde 28 metros casi al final del choque ante el Atlético de Madrid provocó el empate de la Real ante los colchoneros y un respiro al equipo de Imanol que se veía perdiendo su quinto partido en casa esta temporada. Casi sobre la bocina y de forma épica, pero igual de válido, y que brindó un punto con sabor a victoria.
En este 2024 aciago para la Real ha anota hasta en 12 partidos 13 goles a partir del minuto 80. Una estadística espectacular de un equipo no acostumbrado a morir matando. Sin embargo solo valieron para rascar 2 empates (Alavés en enero de 2024 y Atlético de Madrid en octubre de 2024), una remontada (Granada en Marzo de 2024 o el gol de la victoria ante el Espanyol en agosto de 2024) y sentenciar victorias (ante Osasuna en Copa y ante el Valencia en septiembre de 2024). El resto de goles postreros (tantos ante Athletic, Villarreal, PSG, Sevilla y Rayo) se quedaron en el limbo de los goles.
De esta manera la Real se convierte en uno de los máximos anotadores de los tramos finales de partido, dato que también comparte con los de los primeros quince minutos. Una Real que empieza y acaba bien los encuentros, pero que no ha sabido rentabilizarlos.