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Gloria Lobato, la abuela cántabra a la que una sentencia ha dado la razón para poder conciliar su trabajo con el cuidado de su nieta, asegura que esa resolución va a ser un "avance enorme", así como un alivio para estar con la pequeña, y cree que "beneficiará a muchas personas".
En declaraciones a EFE, esta mujer ha contado cómo en una semana la titular del Juzgado de lo Social número 2 de Santander falló que la empresa donde trabaja Gloria debe adaptar su jornada laboral para así cuidar a su nieta, con la que convive, debido a que su hija y madre de la menor está realizando una formación.
Gloria tiene dos hijas, una de 19 años que está en la universidad, y otra de 24, que es la madre de la niña, con la que forma una familia monoparental.
Los horarios de Gloria y su hija -que está estudiando para ser profesora de judo- no permitían que la abuela llegara a tiempo a recoger a la nieta, por lo que esta mujer decidió recurrir al sindicato USO que la puso en contacto con su abogada, quien aseguró que ganarían la demanda, interpuesta el pasado mes de mayo.
"Contentísima y aliviada"
Gloria Lobato está sorprendida de la rapidez con la que se ha desarrollado la causa judicial, pero, sobre todo, está "contentísima y aliviada" porque ahora su nieta "estará mucho mejor atendida".
"Nos va a cambiar la vida a muchas personas", reconoce esta vendedora de telefonía, cuya empresa, Tenyco, tiene veinte días -ha contado- para adaptar la jornada laboral de la mujer al horario que solicitó para conciliar su trabajo con el cuidado de su nieta.
Ha explicado que antes de interponer la demanda, durante el proceso de negociación, la empresa argumentó que no podía aceptar ese cambio de jornada laboral porque las tres compañeras de Gloria tienen adaptada la suya para el cuidado de sus hijos. "Y al ser considerados de primer grado (los hijos) y mi nieta es de segundo grado, no aceptaron", añade.
Por ese motivo se planteó acudir a los tribunales, ya que consideró que la ley la daba la razón, se puso en contacto con USO y en siete meses ha obtenido una resolución judicial, que es firme, y que recoge el derecho de esta abuela a conciliar porque la juez subraya, en su resolución, que así lo reconoce el Estatuto de los Trabajadores.
Desde que acudió al Juzgado hasta que su titular dictó la resolución pasó una semana y cuando su abogada la llamó, Gloria cuenta a EFE que le dio "una alegría muy grande", no solo para ella, sino para su familia y para todas las personas "que están sufriendo por este motivo" de no poder cuidar a una familiar dependiente o a un nieto.
"Se pasa muy mal", asegura Gloria por el tiempo que ha estado intentando conciliar para cuidar más a su nieta, por lo que se alegra "muchísimo" de que ahora los abuelos puedan solicitar ese derecho que le ha confirmado a ella el Juzgado de Santander.