Unai García se encuentra en un excepcional estado de forma. El canterano rojillo, afianzado en este inicio de temporada como compañero de David García en el eje de la defensa de Osasuna, regresa este fin de semana al escenario donde empezó su aventura en la élite. El 1 de junio de 2013, el central rojillo disputaba el primero de sus 184 partidos que ha disputado con la elástica rojilla en partido oficial.
José Luis Mendilibar le dio la alternativa al zaguero de Eskirotz en la última jornada liguera, en la visita al Santiago Bernabéu, en un partido intrascendente para los intereses de Osasuna, ya salvado, donde el técnico de Zaldíbar presentó un once formado por Asier Riesgo; Oier Sanjurjo, Rubén González, Unai García, Nano; Timor, Gato Silva; Cejudo, Armenteros, Roberto Torres y Llorente. El encuentro finalizó con derrota navarra por 4-2 -uno de los goles rojillos llevaban la firma de Roberto Torres, que se estrenaba como goleador con la elástica de Osasuna- y el defensa disputó los 90 minutos del encuentro, tiempo en el que le tocó lidiar con el argentino Gonzalo Higuaín.
Unai Gracía lleva en Osasuna desde los ocho años, con una cesión al Tudelano entre medio, y ahora se ha convertido en uno de los capitanes del equipo. El zaguero ha pasado por temporadas en las que su participación ha quedado relevada a un segundo plano, pero lejos de mostrar una mala cara ha sabido esperar su momento de nuevo. Al central, que en esta temporada ha participado como titular en todos los encuentros ligueros, disputando la totalidad de los minutos, le resta un año de contrato, aunque el club tiene intenciones de prolongar su relación actual, que vence el próximo mes de junio.
De llegar a buen puerto la negociación, su renovación se uniría a la de otros jugadores importantes del equipo en un proceso de consolidación de la plantilla que lleva relizando el club en los últimos meses.