La segunda parte del año va a llegar marcada por la movilización de los sindicatos. La advertencia fue clara el 1 de mayo pero la patronal se niega a contemplar una subida generalizada de sueldos en los convenios e incluir las cláusulas de revisión salarial ante un IPC desbocado que ha hecho perder poder adquisitivo a los trabajadores.
El secretario de CCOO, Unai Sordo, ha sido muy claro esta mañana en los micrófonos de Onda Vasca-Grupo Noticias. Con la negociación colectiva bloqueada, advierte el líder sindical que no se van a quedar parados. "No se puede cronificar esa pérdida de poder adquisitivo y hay que dar la pelea", subraya en referencia a una inflación que está en el 8,4% pero que si quitamos los costes energéticos llega al 4,4%. Es la denominada inflación subyacente, la que repercute directamente en la cesta de la compra y que aunque se corrija el precio de la luz y el gas, apenas va a variar en la segunda mitad del año.
Negociación o huelga
"De momento lo que vamos a plantear es que una subida salarial inicial y las garantías de revisión salarial se trasladen a las mesas de los convenios. Son varios cientos los convenios que hay que negociar en el Estado en este 2022. Hay que tratar de salvar esa negociación. En algunos convenios se podrá y otros no y allí donde no se pueda hacer emprender un proceso de movilización y llegado el caso de huelgas", advierte.
Añade Sordo que si finalmente la inflación general se modera en la segunda parte del año pero la subyacente se mantiene, va a mejorar los excedentes de las empresas. "No es malo siempre y cuando vayan también esos excedentes a los salarios. Lo que no puede ser es que se de esa mejora de beneficios y los trabajadores no vean un duro. No nos vamos a resignar a ese escenario", remarca.
Unai Sordo deja claro que nadie está hablando de subir un 10% los salarios porque podría generar una subida de la inflación de segunda ronda. "No estamos diciendo eso. Estamos hablando de una subida inicial y si hay desvío de la inflacíón se compense antes de fin de año. Eso sí, las empresas tienen que asumir un aumento de costes en sus propias cuentas", explica.
Pone el ejemplo de productos cuyo precio se ha incrementado aunque los costes ya estaban amortizados. "Ha habido una repercusión en los costes que no siempre se justifican en precios energéticos. Las empresas una parte de sus excedentes los tienen que dedicar a mejorar la inversión pero sobre todo los salarios de los trabajadores y trabajadoras", afirma.
Añade además que en este momento de incertidumbre la demanda interna es fundamental y que su evolución a mejor o peor va a depender también de ese poder adquisitivo de los ciudadanos. "Tiene una lógica de justicia social pero también de eficacia económica. Hay que romper mantras neoliberales. Es justicia pero también es eficacia", resume.
Reforma laboral y sus efectos
Ante los buenos datos del paro registrado y de afiliación del pasado mes de abril, el secretario general de CCOO destaca el salto del 48% en la contratación indefinida. "Es un salto cualiatativo", señala y demuestra, en su opinión, que "se puede salir de la crisis creando empleo sin destruirlo. Estamos satisfechos porque son medidas producto del diálogo social", remarca.
"En esta situación de crisis con inflación enorme se ha conseguido recuperar afiliados, se ha subido el SMI y todo es compatible con mayor recuperación de empleo. Se rompen mitos del liberalismo que decía que para salir de la crisis hay que devaluar salarios", subraya,
Aún así reconoce Unai Sordo que la estabilización en la contratación es sólo el primer objetivo de la reforma laboral. El segundo se centra en el despido y afirma, no se ha conseguido. "A partir de ahora hay que tratar de que cuando haya ralentización o recesión se pueda evitar el despido masivo", afirma y en este sentido destaca los ERTE. "Somos partidarios de meter más restricción al despido. Se quedó pendiente y hay que causalizar mejor los despidos", señala.
CEOE
Preguntado por su relación con la patronal CEOE, asegura que la comunicación siempre está abierta a pesar del bloqueo en el acuerdo de la negociación colectiva que va a llevarnos a ver una batalla en la negociación de los convenios colectivos. Insiste en la importancia del diálogo. "No haber roto nunca la interlocución ha contribuido a salvar 3 millones de puestos de trabajo y a muchas empresas", puntualiza.
"Nunca hemos roto canales y este escenario de movilización creciente ojalá de como resultado un acuerdo sobre negociación colectiva para salvaguardar el poder adquisitivo". Respecto a esto lamenta que en Euskadi no sea posible que en la mesa de diálogo social esté la mayoría sindical. Asegura que ha quedado demostrada que la estrategia de ELA es "ineficaz" y que el "camelo y el ventajismo" les ha salido muy mal.
En ciernes una nueva negociación, la del Estatuto del trabajador. El ministerio ha anunciado la creación de grupos de expertos. Unai Sordo advierte de que para que esta reforma se de tiene que abrirse una mesa de diálogo social y reconoce que va a ser "francamente compleja por los tiempos políticos y que la CEOE no tiene muchos incentivos para estar en eso. No va a ser sencillo". Esa futura mesa en cualquier caso, no tiene fecha de apertura.
Pegasus
Se confiesa muy preocupado por el escándalo de espionaje con Pegasus. "No sé si sabremos la verdad pero hay que saber qué tipo de espionajes son estos porque vacían los contenidos del teléfono. Es muy grave. Es un tema de seguridad nacional", remarca.
En cualquier caso no prevé, dice, que vaya a haber rupturas de la coalición de gobierno. "Sería una irresponsabildiad mayúscula y no va a ocurrir. Estoy convencido", sentencia.