El proyecto de Presupuestos generales para Álava para 2023 superó ayer un nuevo trámite al no ser aprobadas las enmiendas parciales. A partir de ahora, habrá que esperar al próximo Pleno del viernes para dar el plácet al documento económico que guiará la labor de gobierno de la Diputación.
Ese plan económico incluye unos ingresos de 3.047 millones de euros. “Estas Cuentas centran su esfuerzo en la consolidación de las inversiones estratégicas para modernizar nuestro territorio, con proyectos que van a situarnos en posiciones de liderazgo. Además, están dirigidas a medidas que protejan a las personas, las familias y las empresas, especialmente las más pequeñas”, explicó en su momento la diputada foral de Hacienda, Itziar Gonzalo.
Para ello detalló las medidas del programa Araba Lagun, que da soporte a las iniciativas que da protección a personas y familias, la movilidad, de apoyo a la actividad económica, al fomento del ahorro energético y de apoyo frente al aumento del precio de la energía, entre otros, citando las partidas destinadas para familias, para el tema de cuidados, dotada de 24,5 millones; 7,8 millones que van a permitir aumentar en 250 el número de plazas en residencias de personas mayores o los 12 millones de euros para las prestaciones no contributivas. En ese programa se ha tenido en cuenta una cifra de 850.000 euros para ayudar a las comunidades de vecinos a pagar las facturas.
También detalló las ayudas a las empresa y pymes, apoyos a la competitividad y medidas financieras para apoyar a las explotaciones ganaderas que están sufriendo el incremento de los precios de las materias primas. También reiteró que se mantendrán las ayudas a los autónomos, aún a costa de un descenso de la recaudación en ese sentido.
En este sentido, el Presupuesto aporta una novedad como es una nueva deducción por el mantenimiento de la actividad económica para los autónomos, que será de 800 euros para los hombres y de 1.000 euros para las mujeres. En definitiva, el proyecto económico pivota sobre tres ejes. El primero son las personas, a quienes se destinan 286 millones de euros; a la consolidación de la economía y creación de empleo, que contará con 32,5 millones de euros; y el tercero son los proyectos de inversiones encaminados a impulsar la necesaria transformación del territorio, a los que se dedicarán 49 millones y a los que hay que añadir 42 millones en créditos de compromiso para los próximos ejercicios, lo que supone 91 millones para proyectos transformadores.