El juicio contra Glovo ha tenido lugar este jueves en Pamplona y ha quedado visto para sentencia. La Seguridad Social reclama a Glovo el pago de las cotizaciones de los trabajadores que estaban como falsos autónomos en 2019 porque considera que estas personas debían haber cotizado por el Régimen General.
Unos 200 repartidores han sido convocados a este juicio, del que dependen sus demandas: lograr la condición de asalariados y que Glovo abone las cotizaciones correspondientes como trabajadores por cuenta ajena, ya que siempre han desarrollado su actividad como autónomos.
LAB se ha concentrado a las 8.20 horas de este jueves frente al Palacio de Justicia de Pamplona para exigir a esta compañía que acepta la normativa. En una pancarta podía leerse: Glovo cumple la ley ya! Riderrak ere langileak gara.
Desde 2019
En 2019 LAB interpuso la primera demanda contra Glovo y pidió que a los repartidores de esta empresa se les hiciese contratos, y la Inspección de Trabajo, “tras la oportuna investigación, les dio de alta en Seguridad Social”. “En diciembre de 2020 llegó la citación de la demanda que Seguridad Social interpuso contra Glovo en Pamplona, en donde 200 trabajadores eran convocados al juicio que comienza año y medio después”, ha afirmado.
Entrada de varios repartidores al Palacio de Justicia.
Este sindicato, mediante una nota de prensa, ha manifestado que no espera “ninguna sorpresa de este juicio”. “La sentencia va a ser favorable a la teoría que LAB siempre ha defendido: los trabajadores de Glovo deben ser contratados, cotizar en Seguridad Social y regirse con un convenio que regule sus condiciones”, ha subrayado.
Sin embargo, este sindicato ha insistido en su comunicado que “hay algo más que denunciar”.
“Hay situaciones dramáticas en la plantilla por la precariedad que padecen: salarios no definidos, jornada laboral sin concretar, ausencia de horarios y de vacaciones”. Por ello, LAB seguirá “luchando por dignificar sus condiciones de trabajo mediante la protesta en la calle y la reclamación en los juzgados”.