Hay quien evita a toda costa opinar, mojarse, hablar, posicionarse o como se quiera decir. Y hay quien tiene muy claro que no piensa dejar títere con cabeza por mucho que alguno se ofenda. Eso sí, Colapso hace esto último con buenas dosis de ironía y sarcasmo, y con una propuesta musical que aunque parte del rock no cierra la puerta al ska, el punk o todo lo que pueda sumarse a la causa.
Así lo demuestra el cuarteto en su primer EP, un Agencia 2030 que es una realidad desde el pasado día 3 tanto en su versión digital como en el formato físico (CD). De esta forma, el proyecto de Andoni (batería), Julen (voz y trompeta), Alatz (guitarra) y Maren (bajo) consolida una trayectoria que arrancó en plena pandemia.
Tras una primera maqueta que vio la luz a finales de 2021 y un 2022 con un buen puñado de conciertos tanto dentro como fuera de Euskadi, “hemos mejorado tanto cantando como tocando. Como grupo estamos más cohesionados y eso se nota en este trabajo”, apunta Andoni.
Bio-Lencia, Mangoneo Verde y Cuatro modas y un funeral son algunos de los temas que componen un trabajo grabado a principios de noviembre del año pasado en Orozko Producciones (Barakaldo). “Nos quedamos más que a gusto pudiendo trabajar en un estudio, con medios y experiencia; es que metimos hasta un fliscorno”, sonríe el batería.
Un disco temático
Aunque cueste hablar de una propuesta conceptual –“nos sale un poco de sarpullido al decir eso”–, lo cierto es que hay un eje común en las seis canciones. “Todo tiene su sentido, desde la portada hasta el orden de los temas”.
Tomando como referencia la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, el cuarteto une su sonido, el humor y una visión de las cosas diferente a la verdad oficial para compartir que “no nos creemos ni la mitad de la película que nos están queriendo vender en pro de la sostenibilidad del planeta, los derechos humanos y demás”.
Desde la pandemia y el papel de las grandes farmacéuticas hasta el postureo verde de las renovables pasando por el uso del fútbol y del entretenimiento superficial hasta llegar a la moda y el consumismo, el EP hace un buen repaso a la actividad de esa Agencia 2030 que da título al trabajo. “Queda así como muy conspiranoico, pero vaya, los jefazos ya se deben juntar una vez al año en un club supersecreto”.
En directo
Sin salir el trabajo, ya a finales de enero se realizó el primer concierto. Tras pasar por Miranda, el grupo también ha llevado sus nuevas canciones a Aramaio. Por delante, en breve llegan nuevas fechas en Aretxabaleta y Villatuerta.
“Nos curramos mucho el directo. Nunca hemos hecho uno igual, en cuanto a orden de canciones, arreglos, o lo que sea. Son cosas a las que siempre les damos importancia”. De hecho, la idea de los gasteiztarras es no parar de tocar este año. Desde el “hazlo tú mismo al más puro estilo patatero” y con este trabajo en la mano, la idea “siempre es seguir mejorando; por eso a otros músicos y a los amigos les pedimos que nos saquen los defectos”.