El Campeonato de Bizkaia disputado en Lekeitio fue la presentación de las traineras este curso. La primera muestra del trabajo realizado en los duros meses invernales y el momento para despejar todas las dudas. Hubo un título en juego y nadie escondió nada. En esa puesta en escena hubo dos golpes claros sobre la mesa. Por un lado el de Urdaibai. Los bermeotarras inician un nuevo proyecto y en la tripulación aparecen muchos nombres de calidad contrastada. Los meses de pretemporada habían sido buenos, pero había que confirmar ese buen hacer en el primer examen del año y así fue. Los entrenados por Iker Zabala consiguieron la victoria por delante de Zierbena, que se mostró mucho más competitivo de lo esperado tras lo visto la semana pasada también en aguas lekeitiarras. Asimismo, en la categoría femenina, Ondarroa sorprendió no solo con su victoria sobre Deusto, el gran favorito, si no por la imagen mostrada. Remando a un nivel sobresaliente y venciendo con más de veinte segundos de diferencia.
Los nuevos proyectos necesitan su tiempo. Muchas horas de trabajo para formar un bloque y lograr los éxitos. Pero Urdaibai no quiso esperar para conquistar un campeonato en esta nueva era y a la primera oportunidad lo consiguió. También Zierbena comenzó con buen pie el nuevo capítulo con Jon Elortegi al mando y finalizó en segundo lugar, peleando durante muchos minutos de tú a tú con los bermeotarras. El tercer lugar fue para Ondarroa y Kaiku completó los puestos que dan acceso al Campeonato de Euskadi con su cuarto lugar.
Urdaibai y Zierbena fueron protagonistas desde las primeras paladas y Ondarroa y Santurtzi, que cayó hasta el sexto lugar, quedaron rápido fuera de la pelea. Los bermeotarras golpearon primero con un primer largo en el que sacaron a relucir toda su potencia, pero Zierbena se rehízo y aprovechó a la perfección cada ola en el largo de vuelta para colocarse en cabeza. Los galipos consiguieron una ligera ventaja. Sin embargo, no sentenciaron y dejaron con vida a la Bou Bizkaia. Urdaibai se agarró a esa esperanza y logró medio bote de ventaja justo antes del último giro, una pequeña distancia pero suficiente para coger una ola que a Zierbena se le escapó. Fue el final de la historia. Los bermeotarras ya no cedieron y aprovecharon a la perfección todo el campo de regatas para hacerse con la victoria.