De extrema necesidad. Instalado en los puestos de descenso y aun sin conseguir una victoria en el año natural, el Glorioso afronta este martes a partir de las 20.00 horas ante un crecido Betis la oportunidad para aliviar su delicada situación y coger aire en la clasificación. Sin embargo, no será un duelo sencillo el que vivirán los pupilos de Mendilibar en el Villamarín. Quizá el mes de enero puede ser el más complejo por la talla de los rivales –Real, Athletic, Betis y Barça– pero no por ello es imposible lograr un punto de inflexión.
Y es que el conjunto comandado por Manuel Pellegrini se encuentra en un estado de forma idóneo, quizá anímicamente en el mejor de lo que llevamos de temporada. Pero eso mismo puede suponer una mala jugada para el cuadro verdiblanco, que se encuentra agrandado tras imponerse al Sevilla en Copa.
De hecho, las horas previas al choque liguero entre el Alavés y Betis han estado mediatizadas por el bochornoso episodio vivido el pasado sábado en el feudo blanquiverde tras la agresión de un aficionado a Jordan y el posterior billete copero del rival albiazul para cuartos en la Copa.