Iñigo Urkullu ha acudido este jueves al Parlamento Vasco por última vez como lehendakari incorporándose al pleno de investidura en el momento que el candidato del PNV, Imanol Pradales, iniciaba su intervención para exponer las principales líneas del pacto de Gobierno que los jeltzales han cerrado con el PSE para formar un gobierno de coalición, y que le garantiza al candidato a lehendakari del PNV la mayoría absoluta necesaria para ser investido.
Antes de incorporarse al pleno, Urkullu ha afirmado que deja su cargo "con la conciencia totalmente tranquila por el trabajo hecho", "deseando lo mejor a Imanol Pradales, y ya "dispuesto a afrontar el futuro".
Sin vacaciones
Tras asegurar que no se toma "vacaciones" porque "la cabeza tiene que seguir trabajando", Urkullu ha dicho que "uno tiene que ser consciente de que, de la misma manera que empieza, también termina" y "hay que saber asimilarlo". "Es una etapa en la vida", ha insistido, para afirmar que está ya "dispuesto a afrontar el futuro".
Futuro fuera de las instituciones
Mucho se ha especulado sobre el futuro de Iñigo Urkullu, pero fiel a su trayectoria al frente del Gobierno vasco durante los últimos 12 años, el lehendakari no ha querido desviarse de sus obligaciones y no ha desvelado los planes que baraja, más allá de que se tomará un periodo de reflexión.
A punto de cumplir 63 años todo indica que Urkullu no baraja retirarse y todo indica que se dedicará a desarrollar un proyecto fuera de las instituciones.