Dijo que iba a sopesar si era necesario tomar más medidas para afrontar la crisis energética y la subida de los precios por la guerra en Ucrania, y que volvería a pulsar la tecla para atender a los colectivos más vulnerables. Dicho y hecho. El lehendakari ha aprovechado el pleno de política general del Parlamento Vasco de este jueves para anunciar un nuevo paquete de medidas valorado en 400 millones de euros que contemplará un incremento en las subvenciones para pagar la factura de la luz, una nueva deflactación del IRPF, y también facilidades para que las empresas accedan al crédito. Esta es la propia vía del Gobierno vasco, que se desmarca así de golpes de efecto como la propuesta para topar la cesta de la compra de Yolanda Díaz pero que también influye en ese aspecto con ayudas al sector alimentario.
En concreto, Urkullu tiene previsto acordar con las instituciones el programa Hitzartuz, para reforzar el apoyo "a los colectivos con mayores dificultades para pagar la factura energética y cubrir sus necesidades básicas", compensar la pérdida de poder adquisitivo y apoyar al tejido empresarial para facilitar el acceso al crédito a empresas viables.
Serán 400 millones de euros y se financiará con recursos presupuestarios propios, fondos del recargo a empresas energéticas y financieras que el Gobierno vasco ha negociado con el Estado para poder contar con esos recursos, y el fondo RePOWER EU para financiar medidas energéticas. Se presentará tras la reunión del Consejo Vasco de Finanzas, pero el lehendakari adelanta que plantea un incremento del 10% en las ayudas de emergencia social que compensen la pérdida de poder adquisitivo, reducir el coste de suministros en el parque de vivienda social para comunidades con instalaciones centralizadas, incrementar el límite de ingresos para el acceso a la vivienda social, ayudas al sector de la alimentación para mitigar el impacto de la inflación en la ciudadanía, ayudas de eficiencia energética para compensar la subida de la factura y favorecer el ahorro energético de las familias, deflactar el IRPF planteando a las diputaciones una nueva vuelta de tuerca que entre en vigor el 1 de enero para atenuar la inflación subyacente, y reforzar el programa de ayudas para el uso de energías renovables en empresas, polígonos industriales, etc. La deflactación del IRPF dependerá de la inflación subyacente que se calcule para el próximo año, y ese dato se conocerá en el Consejo Vasco de Finanzas del 10 de octubre.
40 medidas
En un discurso de aproximadamente una hora y media, el lehendakari ha protagonizado este jueves una de las intervenciones más prolijas en medidas que se recuerdan en la trayectoria de los plenos de política general. En un momento de incertidumbre económica y fatiga ciudadana tras la pandemia y con la actual subida de los precios por la guerra en Ucrania, Iñigo Urkullu ha querido lanzar un discurso muy centrado en la gestión, con medidas que miran hasta el final de la legislatura en 2024. Y lo ha hecho desgranando también 40 medidas específicas que se pondrán en marcha en este ejercicio y que buscan desactivar todos los posibles focos de descontento ciudadano: habrá un plan de choque en materia sanitaria con el foco en la atención primaria, y la dirección de Juventud pasará a formar parte de Lehendakaritza y se dará un impulso a los planes de emancipación para que los jóvenes puedan dejar el nido a los 28 y no a los 30 años.
Acuerdos de país en los presupuestos
Urkullu ha propuesto también acuerdos de país, empezando por los propios Presupuestos para el próximo año y 2024, donde ha puesto la prioridad en el refuerzo de las políticas sociales, el empleo y la reactivación económica, la inversión pública y la inversión en investigación. "Es un momento muy importante y, por ello, los Presupuestos de 2023 y 2024 se deben plantear como acuerdo de país", ha defendido, para añadir después que el consejero Azpiazu negociará con todos los partidos para lograr el acuerdo más amplio posible. Las Cuentas vigentes se pactaron con EH Bildu.
Ha propuesto otros cuatro pactos de país: para reforzar la atención primaria, sobre educación, el reto demográfico y la emancipación de los jóvenes, y la energía.
El discurso de Urkullu ha estado muy centrado en los desafíos emergentes, como el reto demográfico o el cambio climático. Ha vuelto a situar a las personas como eje, y ha reivindicado el papel del Gobierno de coalición PNV-PSE que, según ha dicho, se propone "cumplir la palabra dada". En ese sentido, ha reivindicado la capacidad de respuesta ante la crisis, que el paro se sitúa ya en el 8,5%, y que en Euskadi existe una política de acuerdos entre instituciones, el sector público y privado, y los partidos, que se propone preservar. Ha reconocido los fallos.
Sanidad y cohesión
Urkullu se ha fijado cinco prioridades (cohesión social; empleo, industria y crecimiento sostenible; respuesta al cambio climático con descarbonización y tránsito a energías renovables; reto demográfico y juventud; y Euskadi-Basque Country). Entre sus 40 medidas, destacan el Plan Vasco de Inclusión Social 2025 con perspectiva de género; Plan de Igualdad y despliegue del Pacto Social para la igualdad; Pacto Social por la Vivienda 2026 este mismo ejercicio en colaboración con agentes sociales, económicos, públicos y privados, con una evaluación en quince años y que se aprobará este mismo ejercicio, y en paralelo se presentará este año el Plan Estratégico de Vivienda y Regeneración Urbana.
Habrá un Nuevo Plan de Salud 2029, se anuncia un refuerzo a la Atención Primaria, actualización de la estrategia de 2019 con la participación de 40 profesionales de las organizaciones sanitarias con un plan de inversiones para atención primaria, consolidación de 358 plazas de medicina familiar y personal sanitario, nuevos servicios , exploraciones y pruebas diagnósticas complementarias. Se anuncia un Plan de mejora de las listas de espera y una nueva estrategia de salud mental.
Para las pymes, se anuncian 630 millones euros y que puedan desarrollar 500 proyectos de investigación. Este otoño se firmará el convenio con la Diputación de Bizkaia para poner en marcha la línea 5 del Metro Bilbao y, en materia de juventud, este año se aprobará la Estrategia de Emancipación, con ayudas a los proyectos de emancipación, y para conseguir vivienda y empleo joven.