La Sociedad Deportiva Amorebieta está consiguiendo virar la vorágine negativa en la que se ha visto inmerso durante un tormentoso comienzo de temporada, la que ha significado su doloroso regreso a la Primera Federación y primera tras la marcha de Asier Goiria y sus siete años al frente de su dirección deportiva. Tras once partidos ligueros con un solo triunfo y siete puntos, y la eliminación copera en Barbastro, a las órdenes de Julen Guerrero, su sustituto Natxo González ha caído de pie en su aterrizaje en la localidad zornotzarra. Dos choques y cuatro puntos, los tres de ayer sobre el Barcelona Atlétic in extremis. En poco más de un minuto y en pleno tiempo de prolongación. Urritxe comienza a confiar en los milagros. Y en su equipo.
El técnico gasteiztarra, experto en mil batallas de los banquillos en categorías secundarias ha logrado dar con una tecla que el jarrillero no encontraba, y si bien el día de Unionistas también se reaccionó, no sirvió para ganar con aquel loco 3-3. Lo de ayer, que en otro momento habría supuesto una losa insalvable, supuso todo lo contrario una vez Gaizka Campos encaja el gol de Cedric en el minuto 86.
La fe movió montañas y no solo no se perdió. Se ganó gracias a la puntería del asturiano Berto González y el parisino Aly Coulibaly, que en el 93 dejaba la segunda victoria del curso en un estadio que enloquecía. Hasta Kaxe Aizpuru pudo firmar en el 96 el tercero de no mediar la intervención de Ander Astralaga. Se esperaba que Urritxe fuera un bálsamo en el retorno de su equipo tras el éxodo a Lezama por militar en la división de plata. Demasiados puntos han volado y Natxo ha llegado dispuesto a cerrar la sangría.
Natxo González: "Estos chicos merecían una alegría así"
El máximo responsable del banquillo urdina se mostraba "contento. Estos chicos merecían una alegría así, y qué mejor manera que remontando un partido en los últimos minutos. Creo que se lo merecen. A veces el fútbol es muy injusto, y hoy hace justicia a lo que merecen. La exigencia física y emocional ha sido importantísima y que obtengan este premio me hace muy feliz".
La reacción no se ha hecho esperar. El cambio de entrenador efectuado por Jabi Luaces está surtiendo efecto y la clasificación lo está agradeciendo. El Amore queda a cuatro puntos de la permanencia después del exitoso estreno del míster en casa. Y a la provechosa visita al feudo del Arenteiro con el empate de la semana pasada le sigue otro viaje largo pero igualmente ilusionante para medir fuerzas ante otro de los poderosos del grupo, como es la Ponferradina en su campo de El Toralín este próximo domingo a las siete y media de la tarde.
El cuadro berciano, que viene de ganar en Lasesarre a un Barakaldo que no tuvo la mejor de sus tardes, también se halla a cuatro puntos, tanto del segundo puesto como del descenso. Todo está sumamente comprimido en el este primer grupo de la Primera RFEF.