El Athletic se reencuentra mañana con la liga mes y medio después visitando el siempre complicado estadio del Betis, donde los leones no ganan en el campeonato de la regularidad desde la temporada 2017-18, con José Ángel Ziganda en el banquillo. Será el segundo partido de los rojiblancos tras la conclusión del Mundial, pues retomaron el pulso a la competición el pasado martes en Las Llanas ante el Sestao River. Con las incógnitas propias de un parón tan largo, pero con la convicción de que sus futbolistas están en plenas condiciones, Ernesto Valverde ha puesto el foco en la fiabilidad de su equipo. “Somos un equipo bastante fiable y todavía tenemos que serlo más”, ha asegurado Txingurri, que ve margen de mejora en los encuentros que el equipo disputa lejos de San Mamés.
“No nos hemos quedado contentos con los últimos partidos que hemos jugado fuera de casa. Y en ese sentido es algo que tenemos que mejorarlo. Además, en este tramo que empezamos nos quedan 24 partidos de liga, jugamos once en casa y trece fuera y eso lo tenemos que mejorar. Y mañana es una oportunidad clara”. En este sentido, el técnico ha asegurado que la clave para lograr esa mejoría es “jugar para ganar”. “Tenemos que ser más fiables tanto en la continuidad que tenemos en el juego de San Mamés como fuera. Luego, el resultado te puede venir o no venir. Porque ya sabemos cómo es en el fútbol, que el contrario acierta y tú no. Pero tenemos que tener continuidad tanto en lo que hacemos en nuestro campo como en lo que hacemos fuera y ahí es donde queremos incidir”.
En lo que respecta a su equipo, Valverde no ha escondido que están “bien”, con la única duda de Ander Herrera, que si bien ha completado varias sesiones con el grupo, el hecho de venir de una lesión podría dejarle fuera del equipo. Además, el técnico del Athletic ha asegurado que en el vestuario están “con ganas de recomenzar la liga otra vez y de terminar bien el año”.
Cuestionado sobre el partido en sí, en el que los leones se verán las caras con un rival directo, pues están empatados a puntos en la clasificación con 24 puntos, Txingurri ha sido bastante contundente: “Tenemos motivos para afrontar el partido con ganas. Nos medimos a un rival que está haciendo una buena temporada y es una prueba importante para nosotros. Además, fuera fuera de casa no estábamos bien, o no tan bien como al principio y queremos dar una buena sensación y conseguir la victoria para poder brindársela a Txetxu Rojo, un mito del Athletic. Hay muchas razones para afrontar el partido con ilusión y estamos con ganas de afrontar la segunda fase de la temporada”.
EL RIVAL
Ernesto Valverde ha tenido muy buenas palabras para el Betis, rival mañana del conjunto rojiblanco, del que ha asegurado que “está haciendo una gran temporada” y ha recordado que “ya viene haciéndolas” en los últimos años. “Viene compitiendo jueves y domingo y sigue arriba, con posibilidades de progresar al mismo tiempo en la Europa League. En las últimas temporadas el Betis ha adquirido bastante regularidad en el juego y está bien colocado. Es un equipo con una plantilla larga, buenos jugadores y que saben qué hacer con el balón. Eso sí, tienen alguna baja importante, como las de dos jugadores que acaban de ser campeones del Mundo, pero tienen una plantilla larga”.
En este sentido, si bien no ha querido mojarse sobre el hecho de dónde pueden estar las claves del partido, ha insistido en que “ellos juegan bien”. “Saben manejar bien la pelota y tienen jugadores arriba que están en un gran momento, como Borja Iglesias, Fekir o Juanmi, que sale de lesión pero ya están entrando poco a poco. También tienen jugadores que te pueden dominar como Canales, Guardado… Tenemos que estar atentos. No podemos perderle la cara al partido, porque ellos aprieta, su gente aprieta y con ese ímpetu te meten atrás”.
Por último, al ser cuestionado por la comparativa entre la plantilla que dirigió en el Athletic en la temporada 2013-14, cuando clasificó al equipo a la Champions, y la actual, Valverde ha asegurado que “esta es diferente”. “Entonces, aunque nos costó al principio, adquirimos una forma de jugar y una estabilidad, tanto fuera como en casa, que la mantuvimos durante todo el año. Éramos bastante regulares. Esta es diferente, tiene unas cosas que no tenía aquella. El nivel de presión era más insistente y esta tiene una velocidad y una técnica importante. Cada plantilla es diferente”.