El piloto neerlandés de Fórmula 1 Max Verstappen (Red Bull) se hizo con la 'pole' en el Gran Premio de Canadá, octava cita del Mundial, en una sesión marcada por la aparición de la lluvia desde la Q2 y por las penalizaciones que hubo tras la calificación, con el piloto asturiano Fernando Alonso (Aston Martin), segundo, de vuelta al acecho del sólido líder del campeonato.
Verstappen volvió a ser el mejor en un sábado complicado y donde fue decisivo el momento en el que salir a la pista y el juego entre el neumático de lluvia y seco. Las condiciones cambiantes no impidieron el primer puesto del favorito al Mundial, mientras Alonso vio escaparse el segundo por una bandera roja y 200 metros.
El piloto alemán Nico Hülkenberg (Haas) sí tuvo tiempo de completar su vuelta y ponerse segundo, pero fue uno de los muchos pilotos sancionados después de la carrera. El de Haas fue investigado y penalizado después por estar demasiado tiempo en pista con la bandera roja, con lo que Alonso ganó la posición.
El doble campeón del mundo lo hubiese logrado en pista de no ser la bandera roja, porque, tras el bajón de Montmeló, vuelve a exprimir su Aston Martin. Así, las mejoras que traía el equipo británico parecen responder, aunque las condiciones han sido cambiantes y la carrera se espera en seco, para volver a pelear por el podio y ser el mayor rival de Verstappen.
Por su parte, el también español Carlos Sainz (Ferrari) vivió un mal día en Montreal, con un serio accidente al final de los terceros libres que le condicionó su regreso en la 'qualy' y un octavo puesto en parrilla que se convirtió en undécimo por otra sanción.
El sábado empezó con un ojo en el radar y otro en el trazado Gilles Villeneuve. Con una bandera roja a las primeras de cambio por una avería de Guanyu Zhou (Alfa Romeo) se vio que el día sería largo, un sábado donde lo importante era no cometer errores. En la Q1 no hubo sobresaltos hasta que, con el tiempo cumplido, Pierre Gasly (Alpine) casi tiene un grave accidente con un Sainz que no le vio llegar en vuelta y le taponó a 300 km/h.
De ahí se esperaba la sanción que llegó para un Sainz que, después de un buen rendimiento en seco, sufrió con su Ferrari cuando llegó la lluvia. Antes de que la lluvia cayera mediada la Q2, el más rápido en poner neumáticos de seco fue Alex Albon (Williams). Al piloto inglés le siguió Verstappen, y así el resto pero sin tiempo para usarlos o al menos calentarlos para su buen rendimiento.
Las gotas se convirtieron en diluvio y la Q2 se cobró víctimas ilustres como un Charles Leclerc (Ferrari) muy enfadado por no haber entrado antes a por ese neumático blando; Sergio Pérez (Red Bull), por tercera vez seguida sin llegar a la Q3, y un Lance Stroll (Aston Martin) también contrariado por sus altas expectativas en casa.
Los supervivientes de la Q3 se enfrentaron al aguacero, pero ahí estuvieron acertados quienes se pusieron primero en la cola de salida del 'pit-lane'. Verstappen, en cabeza, aprovechó el mínimo de adherencia que quedaba en el trazado canadiense para marcar un tiempo sin rival (1:25.858) y Alonso estuvo también rápido.
El asturiano se colocó segundo pero una bandera roja a seis minutos de la de cuadros, por un accidente de Oscar Piastri (McLaren), congeló la sesión con Alonso a tres segundos cruzar la meta. A Hülkenberg sí le dio tiempo por los pelos pero no ejecutó bien la bandera roja y al final saldrá quinto.
La segunda línea de parrilla será para los Mercedes de Lewis Hamilton y George Russell, quienes parecen confirmar que en Barcelona dieron un paso al frente. Stroll y Yuki Tsunoda (Alpha Tauri) también sufrieron sanciones en las citas con los comisarios que alargaron el sábado de F1 en Montreal.