Las vacaciones familiares suponen una buena oportunidad para generar lazos con tus seres queridos y desconectar ligeramente de la rutina del resto del año. Si eres de los que has decidido tener hijos últimamente, no te preocupes; tener hijos no implica dejar a un lado los viajes, solamente debes cambiar algunos aspectos. La clave es la organización, de lo contrario, tu estancia de ensueño podría convertirse en un auténtico desastre ante cualquier imprevisto. Con niños casi todo se magnifica.
¿Todavía no has elegido destino? Quizá no puedas realizar ese viaje a la otra punta del mundo que tantas ganas tenías de hacer, pero existen miles de alternativas para disfrutar con tu familia. Es importante adaptar el destino vacacional a la edad de tus hijos. Cuando son muy pequeños se recomienda viajar a lugares cercanos y poco a poco ir aumentando los kilómetros que separan el hogar familiar del destino en cuestión.
Aunque las vacaciones resulten un gran acontecimiento para los niños, el trayecto siempre se hace pesado, sobre todo si se trata de viajes largos o viajes en avión, ya que a esto hay que sumarle las largas colas y las horas de espera. Dos buenos aliados para los largos viajes son la tecnología y la imaginación.
Estos son cinco aspectos que no debes olvidar cuando viajas con niños:
1. Preparar el coche. Asegúrate que la silla en la que deben viajar tus hijos es la adecuada y está homologada, en caso de accidente esta reduce considerablemente los daños del impacto. Si el niño mide más de 135 centímetros, la normativa dice que no es obligatorio usar la silla.
2. Documentación en regla. Antes de viajar, sobre todo si es al extranjero, debemos asegurarnos con suficiente antelación que nuestra documentación está en regla, ya sea pasaporte, DNI o la tarjeta sanitaria. Si viajamos fuera del país, hay que consultar las normativas sanitarias para ponernos las vacunas requeridas. También existe la posibilidad de contratar un seguro de viaje.
3. Tentempiés para el viaje. Si el trayecto es largo, una forma de mantener distraídos a los pequeños es dándoles comida y bebida. Podemos preparar un almuerzo para que lo coman en el coche o podemos parar en una área de servicio y aprovechar para picar algo mientras estiramos las piernas.
4. Qué llevar en la maleta. El equipaje lo haremos según la previsión meteorológica. Es recomendable que los niños viajen con ropa holgada, esto les ayudará a estar cómodos y evitará posibles quejas durante el trayecto. Si vamos a pasar las vacaciones en la playa hay que llevar gafas, gorro y ropa que les proteja del sol.
5. Botiquín. Los niños juegan mucho y son muy activos. En caso de alguna caída o golpe, se recomienda llevar en el bolso un pequeño botiquín con tiritas, gasas y algún antiséptico. A su vez, es importante llevar suficiente crema solar y se recomienda tener repelente para mosquitos.