La victoria del Athletic en Copa de este sábado ha traído (y traerá) imágenes para el recuerdo de todos los aficionados del conjunto rojiblanco. Como suele ser habitual cuando el Athletic se juega un título, las promesas se han sucedido a lo largo de las últimas semanas. Algunas, sencillas y habituales, consisten en peregrinar hasta la Basílica de Begoña. Otras, más alocadas, obligan a aquellos que hicieron la promesa a raparse la cabeza. En Sevilla, un aficionado fue más allá: La cabeza se la tenía que rapar Iker Muniain.
Incredulidad
El capitán, que venía de "tunear" la parte trasera del autobús con un spray, no pudo ocultar su cara de sorpresa al recibir la petición. "¿Enserio?", preguntó Muniain antes de, maquinilla en mano, proceder al corte. El fan, atabiado con una camiseta de entrenamiento que el propio capitán le dio hace años, no pudo contener la emoción tras cumplir su promesa y abrazó al 10 hasta el punto de levantarle del suelo.
Con una sonrisa y desde la escalinata del autobús, Muniain le dijo que le quedaba "muy bien" entre risas. Onda Vasca captó el momento a las puertas del Hotel Barceló Sevilla Renacimiento.