Villalibre no falta a su cita con el gol

El Athletic ha cerrado este sábado oficialmente la pretemporada. Tan solo doce horas después de llevarse la Euskal Herria Txapela en un convincente partido ante la Real Sociedad, el conjunto de Ernesto Valverde ha bajado la persiana veraniega con otro derbi, en esta ocasión contra el Alavés, a puerta cerrada en Lezama. Noventa minutos que se han hecho bastante largos. Los rojiblancos han empatado con los babazorros (1-1), que este curso jugarán en Segunda División. Otra vez Asier Villalibre, que está de dulce, ha sido la única nota positiva en un encuentro sobre el que no hay mucho que contar, porque la calidad del juego no ha sido la que crea afición. Poco está necesitando el gernikarra para superar a los porteros rivales este verano. Está por ver si el entrenador le da bola. El Búfalo no puede ser más efectivo, ya que de los siete disparos que ha intentado en el ultimo mes, cinco han acabado con el balón en la red.

Txingurri, después de apostar en la víspera por el bloque teóricamente titular, ha dado minutos a la unidad B. En la portería ha estado Alex Padilla, por lo que Unai Simón, que sigue entre algodones por sus molestias en el hombro, llegará al primer partido de LaLiga sin haber jugado ni un solo minuto. Nolaskoain y Dani García han arrancado de centrales, ya que con Yeray e Iñigo Martínez tocados, a Valverde solo le quedan Vivian y Paredes. Capa y Balenziaga, recuperado de su lesión en el tobillo, han completado las bandas. Petxarroman, uno de los que tienen muchas papeletas de salir cedido, ha actuado de pivote, con Vencedor también en la medular. Ha repetido suplencia Iker Muniain. Arriba, la referencia ha sido Villalibre, con Adu y Luis Bilbao en los costados, y Guruzeta de media punta. El Alavés ha formado con el once teóricamente titular.

Con más intensidad que precisión, los primeros compases del duelo no han tenido un dominador claro. Petxarroman, con un disparo mordido desde la frontal, lo ha intentado sin éxito. Desde los banquillos, los gritos de Valverde y Luis García emergían entre las gradas vacías. Ha sido el Alavés el que ha podido adelantarse en el marcador en el minuto 18 tras un buen servicio de Rioja dentro del área a Alkain, que a puerta vacía ha mandado el balón inexplicablemente por la línea de fondo. Estaban cómodos los gasteiztarras, todo lo contrario que los leones.

Celebración del gol de Asier Villalibre. Borja Guerrero

El Búfalo no perdona

Hasta que ha aparecido, una vez más, Villalibre. El Búfalo está en racha. El primer balón que ha tocado ha acabado en las redes. Un buen servicio de Guruzeta le ha dejado solo ante Sivera y con la zurda, según venía, ha subido el primer tanto al marcador. El gernikarra, con dos dobletes ante el Bochum y el Mirandés, es con cinco goles el pichichi de la pretemporada. Parece que parte por detrás de Raúl García e Iñaki Williams en los gustos de Valverde para formar de nueve, pero Villalibre se está ganando a pulso la titularidad.

El gol no ha cambiado el guion del partido. El Alavés ha seguido con el dominio de la posesión y ha dispuesto de varias ocasiones claras para empatar. La falta de puntería les ha penalizado y eso que la defensa rojiblanca les ha concedido algunas ayudas. Tras el descanso y con los mismos onces que han posado desde el inicio, el nivel del juego no ha mejorado, sino todo lo contrario. Las imprecisiones han sido constantes.

A la hora de juego, Villalibre ha dispuesto de la segunda ocasión clara de gol. Pero esta vez, con la pierna derecha, ha buscado la rosca pero el disparo se ha marchado desviado. Acto seguido ha sido sustituido por Muniain. También han entrado De Marcos, Morcillo y Nico Serrano, estos dos últimos en la rampa de salida a la espera de encontrar un nuevo destino. Precisamente, el extremo navarro, en la primera ocasión que ha tenido, ha estrellado el balón en el larguero tras un zapatazo con la zurda.

Fallo de Nolaskoain

El que no ha perdonado ha sido Mamadou Sylla. A ocho minutos para el final, el delantero del Alavés, que había salido de refresco poco antes, ha aprovechado un grueso error de Nolaskoain para poner las tablas en el marcador. El jugador del Athletic, que era el último en la zaga, ha querido controlar con el pecho y el atacante senegalés le ha robado el balón para acto seguido cruzarla sin problemas ante la oposición de Padilla. Acto seguido, el propio Sylla casi ha marcado el segundo.

El amistoso no ha dado para más. El bagaje del conjunto bilbaino desde que comenzó la preparación hace un mes es de tres victorias, cuatro empates y una sola derrota. Números que quedarán para la estadística y poco más, porque lo realmente importante llegará el lunes 15, con la visita del Mallorca a San Mamés en el estreno liguero. Sumar los tres puntos será lo verdaderamente importante.