Nueve días después de morder el polvo ante el Betis en San Mamés en la última oportunidad perdida para asaltar posiciones de Europa League, el Athletic retoma esta tarde (18.30 horas, M+LaLiga) el pulso a la competición frente al Villarreal en el estadio de La Cerámica. Lo hace sin el lesionado Iñigo Martínez, ni el sancionado Dani Vivian en la convocatoria de Ernesto Valverde, pero con la aparición por sorpresa de Yeray Álvarez, alistado de urgencia pese a no haber completado ninguna sesión de entrenamiento con el grupo desde la visita al Mallorca el pasado día 1 hasta este mismo viernes. El central de Barakaldo, que forma parte de una lista de 22 jugadores en la que causa baja Unai Vencedor por una contusión en la tibia, apunta así las cosas a formar pareja de centrales con Aitor Paredes, quien figuraba hasta ayer como único futbolista específico apto para ejercer en dicha parcela del terreno de juego.
Con cierto alivio, a pesar del comprometido estado físico de Yeray, afronta de este modo Ernesto Valverde la crucial cita ante el Villarreal, la enésima reválida para los rojiblancos. El envite exigirá al máximo al conjunto bilbaino, que tendrá enfrente a un rival que apura sus opciones de pelear por la cuarta posición que defiende la Real Sociedad, plaza que atisba a siete puntos de distancia. En quinto escalón con otros tantos puntos de ventaja respecto a Girona y Athletic, séptimo y octavo clasificado, respectivamente, asoma el equipo dirigido por Quique Setién, al que los leones buscan derrotar a domicilio con el objetivo de mejorar o, cuando menos, no empeorar su situación en la tabla.
En medio de un mayúsculo atasco con Europa como anhelado premio a solamente cinco partidos vista se encuentra la tropa de Valverde, que figura a cinco puntos del sexto clasificado, el Betis; con los mismos puntos que el Girona, en poder del billete para la Conference League al tener ganado el gol average particular a los rojiblancos; con dos puntos de margen respecto al Rayo Vallecano y tres más que Osasuna y Sevilla. La lucha por el pasaporte europeo, por lo tanto, amenaza con prolongarse hasta el último suspiro y cualquier tropiezo a estas alturas de la temporada puede resultar insalvable a posteriori. Bien lo sabe el Athletic, al que no le faltan precedentes que lamentar en los cinco últimos años, en los que siempre ha fallado en los momentos decisivos. En las últimas semanas, siguiendo la misma tónica, ha dejado pasar hasta tres oportunidades al sumar solamente uno de los nueve últimos puntos en juego sufriendo, para más inri, dos derrotas en San Mamés.
Mejor a domicilio
Llegados a este punto, desafiar al Villarreal con el cartel de visitante colgado a la espalda, por extraño e inusual que se antoje, puede resultar incluso beneficioso para el colectivo rojiblanco atendiendo a los números, pues de los 47 puntos recolectados desde el inicio del curso 24 se han sumado en San Mamés y 23 fuera de casa con un partido menos disputado a domicilio. En caso de ganar hoy al Submarino amarillo, el Athletic igualaría de hecho el número de triunfos logrado esta temporada como local y como visitante en LaLiga con un total de siete, objetivo que persiguen los rojiblancos a la espera de amarrar ante Celta y Elche los seis puntos restantes en La Catedral.
El Villarreal, con diez puntos más en su estadio que lejos del mismo, se presenta aun así como un importante desafío para los rojiblancos. Recuperados para la causa europea Gerard Moreno y Giovani Lo Celso, con opciones desiguales de formar parte de un once inicial en el que no habrá rastro en defensa del lesionado Raúl Albiol, los castellonenses buscarán someter al Athletic a través de la innegociable posesión de balón por la que aboga el técnico Quique Setién, quien debutó con derrota en liga en la primera vuelta en San Mamés. Un solitario gol de Iñaki Williams a pase de Raúl García en la segunda mitad del encuentro sirvió para tumbar el pasado 30 de octubre al Villarreal en otro choque de altos vuelos en el que Iñigo Martínez y Yeray Álvarez, alistado sobre la bocina, secaron a la delantera amarilla.