Vitoria se ha sumado este miércoles, 1 de diciembre, a la conmemoración del Día mundial de la lucha contra el Sida, justo cuando se cumplen 40 años del primer diagnóstico de la enfermedad en el Estado español.
Lamentablemente, cuatro décadas después de aquel hito, "el estigma continúa", tal y como recordado en declaraciones a este periódico Ana Girón, trabajadora social de Sidálava.
A pesar de la lluvia, intensa por momentos, el colectivo ha instalado una mesa informativa en la Plaza de la Virgen Blanca, donde ha puesto sobre la mesa a través de un manifesto una de sus grandes prioridades actuales: Objetivo cero discriminación.
"Siento vergüenza y miedo al rechazo"
Además, Sidálava ha dado voz a varias personas seropositivas, leyendo varias duras frases reales que demuestran hasta qué punto ese estigma sigue vivo. Personas que no han estado ahí, precisamente, porque no quieren identificarse.
Esta ha sido una de ellas: "He tenido muy pocas parejas, ya que siento vergüenza y miedo al rechazo. No me apetece tener pareja porque supone contar lo que me pasa y enfrentarme a la reacción de la otra persona. Hace años di el paso de contarlo y la persona desapareció".
El colectivo ha instalado también un photocall para invitar a todos los viandantes a retratarse a favor de la no discriminación.
Más pruebas, más positivos en 2021
Según los datos difundidos por Sidálava, las 433 pruebas diagnósticas de VIH realizadas en lo que va de año por la asociación han hecho aflorar seis nuevos positivos. A estas habría que sumar las detectadas, por ejemplo, en el ámbito hospitalario o las farmacias.
Los casos detectados solo por Sidálava prácticamente se han duplicado este año respecto a 2020, pero porque el ejercicio pasado, confinamiento mediante, se realizaron menos pruebas.