“Ion Gabella es un gasteiztarra que tiene que ser reconocido como se merece. Vitoria tenía una deuda con él desde hace 20 años”, una obligación con la que este viernes, por lo menos en parte, se quiere cumplir, tal y como describe el alcalde de la capital alavesa, Gorka Urtaran.
Para ello, los Florida, a partir de las 19.00 horas, van a ser el escenario para la proyección de la película Ion, pasión y rebeldía, un documental que no solo sirve para recordar al actor y a la persona, sino también para mirar a aquella ciudad que tanto cambió a lo largo de las décadas de los años 60, 70, 80 y 90.
Compañeros de profesión, amigos y familiares ofrecen su testimonio en un trabajo dirigido por Eloi Beato. “Mira que yo era su amigo y, sin embargo, a lo largo de la realización de las entrevistas con otras personas descubrí aristas de Ion que no conocía”, explica el creador.
Esas distintas caras del intérprete nacido en Gasteiz en 1968 y fallecido en Zumaia en 2002 al sufrir un accidente con la moto se reúnen en una propuesta audiovisual producida por Estudio Clementine y Palamont Pictures, una cinta que este sábado también se podrá ver en la sala Harresi de Agurain.
Con estos pases, como dice Urtaran, se quiere hacer visible “un reconocimiento justo y merecido” para un actor que en su corta trayectoria consiguió participar en no pocos proyectos tanto teatrales como audiovisuales, que le llevaron a ser considerado uno de los nuevos secundarios de lujo de la escena.
Preguntarse qué hubiera pasado hasta hoy si aquel 29 de julio de hace 20 años el guion hubiera sido distinto, no merece la pena. Lo relevante es rendir este homenaje que ha conseguido llevarse adelante a pesar de la financiación ajustada, de la complejidad para poder contar con todas las personas que querían participar, y el hecho de que por el camino de esta película se cruzase una pandemia.
Con todo, “nunca hemos pensado en abandonar; aunque fuera más tarde, teníamos claro que esto había que hacerlo”, apuna Patxi Gabella, hermano del actor y productor de la cinta junto a María Palacios. “El proceso ha sido un viaje de emociones, una montaña rusa” en la que el equipo ha constatado “la admiración que incluso a día de hoy, 20 años después, sigue despertando entre quienes fueron sus compañeros”. De hecho, tanto Beato como Gabella y Palacios reconocen que “ha habido entrevistas mucho más emotivas de lo que esperábamos”, como por ejemplo la realizada con el actor Karra Elejalde.
El actor y su Gasteiz
Como bien dice Patxi Gabella, que reside desde hace unos años en Cantabria, estas dos proyecciones tienen un valor personal añadido. “Me alegra a casa con Ion” y volver a recorrer unas calles que también su protagonismo a lo largo del documental. Al fin y al cabo, “Ion era una persona de su tiempo”, de aquella Vitoria marcada por los asesinatos del 3 de Marzo, por el crecimiento de población, por el nacimiento y asentamiento de los nuevos barrios, por la conflictividad política y social...
En aquel hervidero, también cultural, y con el Casco Viejo como punto de encuentro pero no como el único sitio donde hacer camino, “Ion y quienes compartieron aquellas generaciones” configuraron una Vitoria rebelde, inconformista, activa e irreverente, una capital alavesa que se refleja en este relato como testigo de unos tiempos que, se quiera admitir o no, siguen teniendo sus ecos en la actualidad. “Eran años de calles llenas y de explosión cultural” en los que, como apunta Urtaran, “Ion y muchos otros jóvenes escribieron la historia de la ciudad”, de un lugar “abierto y plural”.
Por supuesto, ha habido cosas que se han quedado en el tintero de este proyecto en el que, al principio, Beato solo iba a ser un participante, aunque casi al instante recibió el encargo de dirigirlo. “Por ejemplo con Alex de la Iglesia ha sido imposible cuadrar agendas”, aunque la lista de participantes de nivel es amplia y variada. “Creo que a muchos nos ha servido también para hacer terapia y soltar muchas cosas que no pudimos decir sobre Ion al ser su muerte tan repentina”.
Por la pantalla pasan, además del mencionado Karra Elejalde, Unax Ugalde, Ana Lucía Villate, Patxi Bisquert o Leire Berrocal, Enrique Urbizu, Juanma Bajo Ulloa, José Luis Rebordinos, Koko Rico, Mauro Entrialgo, Joseba Beloki, Gari, Bingen Mendizabal, Triku Villabella y muchas otras personas.
Caras que este viernes por la tarde iluminarán, a lo largo de poco más de una hora, la pantalla de los Florida. Tras la proyección del documental se celebrará un cineforum. Y a buen seguro habrá tiempo también para compartir algún bar, alguna anécdota, alguna lágrima. “Todo esto lo hemos hecho con todo el cariño y el respeto”. Eso, sin duda.