Vox justificó ayer lunes que rechaza la violencia de género por ser un “concepto ideológico”. Después de que el pasado viernes su número dos en la Comunitat Valenciana, José María Llanos, negara su existencia; ayer fue el presidente de la formación de ultraderecha, Santiago Abascal, quien trató de limpiar la imagen de su partido ahondando, para colmo, en que es quien se ha enfrentado con “más contundencia” desde sus orígenes a la violencia contra las mujeres, cuya existencia admite.
Abascal se refirió al documento que Vox hizo público ayer lunes en las redes sociales y que recopila en doce puntos las medidas que proponen para proteger a las mujeres. “Con esto intentamos que se escuche lo que hemos dicho siempre, desde el inicio”, recalcó Abascal, cargando contra el PP por haber “comprado las calumnias” de la izquierda sobre las posiciones de su fuerza política. En este sentido, incidió en que este documento “va a servir de guía para las negociaciones en los gobiernos” y retó al PP a decir en qué no está de acuerdo con ellos.
De igual forma se pronunció el portavoz de Vox, Jorge Buxadé, adelantando que quieren la derogación de la Ley de Violencia de Género para su sustitución por una “ley integral de protección de las mujeres y las familias”. El dirigente ultra reivindicó que el género es “un concepto ideológico” y cree que la postura de Vox es la que defiende la mayoría de los ciudadanos “cuando toma café en un bar o cena con su familia”, y que puede ser avalada por los votantes del PP e incluso del PSOE. Por ello, Vox presentará una queja ante la Junta Electoral Central contra un programa de TVE por convertirse en “abrevadero de odios contra Vox” y también actuará judicialmente contra Tania Sánchez por “insultar y calumniar” al partido y sus seguidores. Además, lamentó que “algunos” dirigentes del PP “se hayan sumado a esta estrategia de manipulación”. “Seguirán engañando y seguirán mintiendo, pero ahora ya está negro sobre blanco nuestra posición”, zanjó.
Endurecer penas
Por su parte, Abascal añadió en Telecinco que las propuestas de Vox no suponen una “marcha atrás” y, como prueba, dijo que son el único partido que pide un endurecimiento de las penas, incluida la prisión permanente para asesinos y violadores y el que “se ha enfrentado con más contundencia contra este Gobierno que ha puesto a los violadores en la calle”. Negó que les cueste “verbalizar” la violencia contra las mujeres y subrayó que sí pronuncian las palabras maltratador, violador o asesino. “Simplemente creemos que el sexo es una cuestión biológica, pero el género autopercibido, en el que uno se siente una cosa, se siente otra, es un concepto ideológico que no compartimos”, argumentó, tras lo que precisó que “hay muchos tiempos de violencia”, todas ellas “deplorables”.
Extremadura
Rechazan la oferta del PP. La presidenta del PP de Extremadura, María Guardiola, ofreció ayer a Vox ostentar la presidencia de la Asamblea de Extremadura, que se constituye hoy, a cambio de “libertad para la confección del gobierno” de la Junta de Extremadura. Una propuesta que Guardiola entregó a los representantes de la ultraderecha, y que la formación liderada en ese feudo por Ángel Pelayo Gordillo rechazó, exigiendo formar parte del Ejecutivo, tal y como lograron en la Comunitat Valenciana.