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España vio cumplido este miércoles, junto a Marruecos y Portugal, el anhelo que persiguió sin éxito hace catorce años, también junto a la Federación Portuguesa, cuando la FIFA no le otorgó el papel de organizador del Mundial de 2018 y eligió a Rusia como anfitrión.
La denominada en 2010 candidatura Ibérica, formada por España, que acababa de ganar el Mundial de Sudáfrica, y Portugal, se quedó a dos votos de la victoria para ganar la organización de la Copa del Mundo de 2018, en una elección con cuatro candidaturas que necesitó dos votaciones para su resolución.
Fue el 2 de diciembre de hace catorce años en el auditorio Messezentrum de Zúrich. Allí el Comité Ejecutivo de la FIFA, órgano competente entonces para elegir el anfitrión del Mundial, escuchó las presentaciones de todas las candidaturas antes de votar, con intervenciones como las de José Luis Rodríguez Zapatero y José Sócrates, presidentes de los gobiernos de España y Portugal, entre otros.
España y Portugal se quedaron a dos votos de Rusia para 2018.
En la primera votación Inglaterra recibió dos respaldos, Holanda/Bélgica cuatro, España/Portugal siete y Rusia nueve.
En la segunda, la candidatura de Holanda/Bélgica obtuvo dos votos, la Ibérica siete y Rusia trece, resultado que privó a España de volver a ser anfitrión mundialista como lo fue en 1982.
La única candidata a la que la evaluación de FIFA reprochó un "alto riesgo" en transporte por sus aeropuertos y conexiones internacionales, la que menos oferta de entradas presentaba (3.141.000) y la que más estadios debía construir, 13 nuevos de los 16 que propuso, con renovación en los otros tres, se impuso a proyectos más valorados como los de Inglaterra y España y Portugal.
El gran ausente en aquella votación fue el presidente ruso, Vladimir Putin, quien, como protesta por las acusaciones de posible corrupción en la FIFA hechas sobre todo desde Inglaterra, prefirió no acudir por respeto a los representantes de esta. Horas después de la votación sí viajó a Zúrich ya como ganador.
El detonante del 'FIFA-Gate'
En aquella fecha y por primera vez hasta hoy, la FIFA también eligió al organizador de Catar 2022, decisión que fue uno de los detonantes del luego conocido como caso "FIFA-Gate" de corrupción, que acabó cinco años después con el mandato de su anterior presidente, el suizo Joseph Blatter.
Para decidir sobre 2022 hicieron falta cuatro rondas. En la primera cayó eliminada Australia con tan solo un voto, puesto que Japón y Estados Unidos recibieron tres, Corea del Sur cuatro y Catar once.
En la segunda Japón se despidió con dos votos, al conseguir el proyecto sudafricano y el estadounidense cinco y el qatarí una decena.
Corea del Sur, con cinco respaldos, fue eliminada en la tercera ronda. Estados Unidos logró seis y Catar once.
Con salida de Blatter de la presidencia de la FIFA en junio de 2015 y la llegada al cargo de Gianni Infantino en febrero de 2016 la elección del organizador del Mundial tiene ahora otro sistema y su designación corresponde al Congreso, en el que están representadas sus 211 asociaciones miembros.
En 2018, antes de la inauguración del Mundial de Rusia, el Congreso eligió la candidatura de Estados Unidos, México y Canadá para organizar la competición en 2026 frente al proyecto presentado por Marruecos, que logró 65 votos frente 134.
Será la primera Copa del Mundo en tres países, modelo que se volverá a repetir en 2030 con Marruecos unido al proyecto inicial de España y Portugal y con tres partidos en Sudamérica, Argentina, Paraguay y Uruguay que serán los encuentros de celebración del centenario del Mundial, cuya primera edición se celebró en Uruguay en 1930 con victoria de la selección anfitriona.