Con gran experiencia en el cine –fue jefe de prensa de El Deseo, representante de Penélope Cruz y estudió dirección en Los Ángeles– Javier Giner se estrena este año en el Zinemaldia como codirector de Yo, adicto, algo que le tiene tan emocionado como nervioso. “Es que yo soy vasco”, resalta.
“Significa un montón, claro. Yo soy de Barakaldo y mi crecimiento cinematográfico y casi te diría que emocional está muy ligado al Festival de San Sebastián. Recuerdo cuando mis padres me llevaban a los 14 años de Barakaldo a Donosti, y pasaba una semana en casa de mi tía, veía películas y me empapaba de cine”, recuerda con una gran sonrisa.
Así que “de repente, aparecer con mi debut en forma de serie, con esta historia tan íntima en un marco como el del festival, aparte de que me hace muy feliz, tiene como un sentido muy íntimo para mí y muy unido a mi vida. Estoy muy emocionado, la verdad”, asegura.
En sus seis episodios, la serie adapta la novela que Giner publicó en 2021 y en la que contaba sin tapujos su proceso de desintoxicación, que comenzó con su ingreso en un centro especializado cuando tenía 30 años. En aquel momento llevaba varios años metido de lleno en una adicción al alcohol y la cocaína en la que había caído tras regresar a Madrid de su experiencia en EEUU.
Pese a haber crecido en el País Vasco de los años 80, en plena epidemia de heroína, para Giner (Barakaldo, 1977) los toxicómanos eran esas personas que estaban al otro lado de la acera, escondidas en portales con jeringuillas. Luego, las inseguridades, los miedos, el rechazo a uno mismo o el no saber gestionar bien las emociones le hicieron caer en una espiral de adicciones que logró superar y que tan abiertamente cuenta en su libro y reflejará la serie.
“¿Sabes lo que me pasa? Que como ya escribí el libro en el que se basa la serie, la forma en la que he intentado también adaptarlo junto a Aitor Gabilondo, hay algo como que me sobrepasa, hay algo que es mucho más importante que mi intimidad y que la posible vergüenza que yo pueda tener a enseñar todo eso en una pantalla”, explica.
Lo que realmente siente es la necesidad de “devolver al mundo todo lo bueno” que hicieron con él. “Me parece mucho más importante hablar honestamente de la salud mental o de una enfermedad tan devastadora como la adicción”, asegura. Pero también confía en que “la serie de alguna manera pueda ser catártica o pueda ayudar o acompañar a muchas personas que yo sé que están ahí fuera y que lo están pasando mal”.
Esa forma de pensar le hace creer que la serie no va de él, sino de algo “que nos sobrepasa a todos nosotros. Y creo además que estamos muy necesitados en esta sociedad de empezar a mostrar las vulnerabilidades, de hablar de las emociones, de cosas que nos pasan y de los monstruos que habitan en todos nosotros de alguna manera porque estamos muy necesitados de humanidad”.
Yo, adicto está protagonizada por Oriol Plá (El día de mañana), Nora Navas (Los Farad), Alex Brendemühl (Reina roja), Victoria Luengo (Antidisturbios), los vizcainos Ramón Barea e Itziar Lazkano, Marina Salas (El barco) y Omar Ayuso (Élite), entre otros.