La tensión entre PSOE y Podemos por la reforma laboral va a quedar enterrada, al menos, hasta el próximo martes. Ese va a ser el día en el que Pedro Sánchez reúna a Nadia Calviño y a Yolanda Díaz para fijar una postura común sobre la reforma laboral con la que acudir a la negociación.
Con este encuentro, Pedro Sánchez da un paso que ha gustado a Podemos, y toma protagonismo en la polémica entre los socios del Gobierno español. Una vez aclarada la metodología, es decir, que el PSOE consiente en que sea Yolanda Díaz quien lidere la negociación, y que Podemos asume que en esta negociación habrá representación de otros ministerios, solo queda acordar el contenido de la reforma laboral. Y esto es lo que van a hacer Díaz y Calviño en la reunión que presidirá Sánchez el martes. Sentarán las bases con las que acudir a la mesa que se celebra cada miércoles con los agentes sociales.
Además, las reuniones de coordinación entre todos los ministerios van a ser periódicas y se reunirán cada semana para coordinar la reforma. Una metodología que ha gustado a Yolanda Díaz que considera que las discrepancias entre los socios eran de contenido, y ahora se podrán aclarar. También le parece bien a la parte socialista del Gobierno que insiste, sin embargo, en que las diferencias eran de metodología.
Los sindicatos reclaman no revisar lo ya acordado en la mesa, mientras que la patronal dice querer un acuerdo, insiste en no desmontar la reforma laboral, y señala que no dudará si tiene que decir no a la reforma laboral en la mesa.