Cuando caiga la noche, zamar handiak, zamar txikiak y neskak volverán este sábado a ser dueños y señores de las calles de Olazti en una comitiva en la que no faltarán las principales autoridades locales: el alcalde, el cura, el médico y el guarda entre otros, como se hacía antiguamente. Pero el carnaval es irreverente y los zamarros, grandes y pequeños, tendrán el mando, con licencia para lanzar tierra a aquellas personas que se crucen en su camino.
Además, este año contarán con la compañía de Atenazador, con sus temidas tenazas articuladas y la Filandorra, que persigue a la gente tirando ceniza. Se trata de dos principales personajes del carnaval de San Vicente de la Cabeza, una curiosa mascarada que se celebra el 11 de agosto, día en el que el carnaval olaztiarra acudirá a este pueblo de Zamora para devolver la visita.
KALEJIRA
Tras una comida popular para calentar motores y metidos en la piel de otros personajes, la salida será a las 18.30 horas desde la pista de futbito, con paradas en los antiguos abrevaderos, donde se repartirá queso y vino. Continuará por la ermita de San Sebastián, donde se unirá al grupo Mari Arroka, que bajará desde Urbasa rodeada de fuego. De allí se irá a la plaza de San Miguel, donde los quintos y quintas de este año bailarán el Zortziko de Olazti.
Como novedad, el Ayuntamiento ha organizado un concurso de balcones con premios para los mejor decorados. Y es que las casas también se visten para esta fiesta. El primer premio está dotado con 150 euros, 100 euros el segundo y para el tercero son 50 euros. Si bien deberán estar hasta el 25 de febrero, el fallo se conocerá este sábado, después de que el jurado visite todos los balcones inscritos, 20 en total.