El próximo día 13 de febrero el municipio de Zestoa vestirá sus mejores galas para acoger una nueva edición de la Kobaz Koba Trail; una carrera de montaña organizada por los clubes Arazi IKT y Agiro Mendi Kluba con la ayuda del Consistorio local que, dadas sus características, es mucho más que una prueba deportiva.
No en vano, el recorrido de la Kobaz Koba Trail de este año ha sido diseñado para que las y los participantes transiten por los mismos caminos que utilizó el ser humano primitivo; esto es, por senderos, cuevas y yacimientos prehistóricos de un gran valor histórico, natural y cultural.
Tanto es así que las 640 personas que han tenido la suerte de hacerse con un sitio en la línea de salida (los dorsales que se pusieron a disposición de los atletas para la prueba larga de 25 kilómetros y la corta de 15 kilómetros se agotaron muy rápido y actualmente hay una lista de espera conformada por unos 175 corredores), tendrán la posibilidad de pasar junto a destacadas cavidades prehistóricas como las de Ekain, Danbolinzulo, Astigarraga, Amalda, Praileaitz, Astuigaña, Erraila, Urtiaga, Ermitia o Erlaitz; sin olvidar que el recorrido de la carrera también pasará por el yacimiento de Irikaitz y el monolito de Arluze.
Según explican desde la organización del evento deportivo, "para la edición de este año hemos organizado un bello y singular recorrido por los senderos de la zona de Zestoa que permitirá disfrutar de un patrimonio natural e histórico único".
Por ello, los organizadores quieren dar las gracias "a todos los propietarios de tierras que han ofrecido su colaboración para hacer posible este itinerario"; así como "a las entidades patrocinadoras y colaboradoras, al pueblo de Zestoa y a las personas voluntarias que ayudan en el marcaje del recorrido, en los avituallamientos, en los cruces, en el parking, en el reparto de dorsales, en la consigna...".
Medidas frente a la pandemia Con el objetivo de garantizar la salud y la seguridad de participantes y público, la organización de la Kobaz Koba Trail ha establecido este año un riguroso protocolo para evitar contagios de covid-19 durante la prueba.
Así, las y los corredores deberán llevar la mascarilla puesta en la salida neutralizada (un kilómetro, aproximadamente) y después de cruzar la línea de meta.
Además, los responsables de la organización han decidido "dejar para otro año" tanto el hamaiketako como el ambiente festivo que habitualmente tienen lugar en la plaza de Zestoa durante la celebración de la prueba. Todo ello, con la particularidad de que este año no tampoco se llevará a cabo el tradicional acto para la entrega de premios, sino que estos "se entregarán a los y las corredoras que hagan podio en cuanto crucen la meta".
Asimismo, la organización pide a todas las personas que acudan a ver la carrera "que tengan una actitud ejemplar, cumpliendo las normas".