Zorrotzaurre estrenará su primera nueva calle al tráfico en Semana Santa

La Junta de Concertación de Zorrotzaurre (JCZ) tiene previsto inaugurar en Semana Santa la primera calle que formará parte de la nueva movilidad viaria de la isla. Se trata de un arteria que suma en total 400 metros de longitud y cuya apertura es necesaria al tener que clausurar la entidad responsable de la urbanización de la isla el actual acceso viario y de peatones existente desde el puente de Frank Gehry hasta la orilla de la ría que conforma la calle Ribera de Deusto.

El nuevo recorrido asfaltado será el que sirva a los vecinos de Zorrotzaurre y los que trabajan en la isla y se iniciará unos 50 metros una vez superado el puente que sobrevuela el canal, en el mismo punto donde ya se percibe la avenida Galleteras, la principal que atravesará a lo largo de casi toda su longitud la isla.

La calle, cuya base ya es perfectamente visible al estar elevada sobre la base inicial de la isla unos dos metros para evitar los efectos de desbordamientos de la ría, pasa por detrás de la conocida como La casa de la Palmera y practica una leve curva recorriendo unos 320 de longitud hasta llegar a la altura de la antigua sede de Coromina Industrial, el viejo edificio de 1928 que permanece a la espera de su restauración mirando a la ría. Desde aquí, el trazado gira 90 grados para alcanzar recto la Ribera de Deusto de forma que el tráfico pueda continuar en dirección derecha, hacia el resto de la isla, o hacia la izquierda, para uso de los vecinos que viven en las casas ribereñas en una vía que no tendrá salida y se quedará en un fondo de saco.

Juan Carlos Sinde, director de la Junta de Concertación y de la Comisión Gestora de Zorrotzaurre, explica que “este último tramo en perpendicular a la ría es en el proyecto final una arteria peatonal, pero ahora la tenemos que habilitar para el tráfico”.

Esta sección, de apenas 80 metros de largo, quedará provisional, pero lo que ya tendrá su configuración definitiva es el resto de la calle que aún no ha sido bautizada por el Ayuntamiento de la villa. Estos días ya están tendidas tuberías y canalizaciones en la superficie a la espera de enterrarlas y que conformen el conjunto de servicios públicos y privados imprescindibles para atender las necesidades del futuro vecindario. La artería contará con dos carriles en la calzada, uno en cada sentido del tráfico, flanqueados por amplias aceras. Cada una de ellas tendrá plantados unos 30 árboles.

Este primer cambio en la viabilidad de la isla y la inhabilitación del actual acceso es consecuencia de la posterior construcción, a partir del próximo verano, de un subfluvial que atravesará la ría por su fondo entre la isla y Olabeaga.

Subfluvial bajo el fondo de la ría

“Necesitamos el espacio porque todo ese muelle vamos a tener que levantarlo”, detalla Sinde. El subfluvial acogerá dos conducciones para energía eléctrica, otra para el abastecimiento de agua y una cuarta para evacuar los vertidos que generen los nuevos vecinos. La zanja que se excavará en el fondo de la ría contará con 82 metros de largo, cinco metros de profundidad y casi 15 metros de ancho.

La misma acogerá las tuberías descritas para luego cubrir todo el conjunto con balasto y piedra de escollera, que quedará a 2,20 metros por debajo del fondo natural del cauce. El subfluvial conectará en ambas márgenes con sendas arquetas de gran tamaño, destacando la complejidad constructiva que supondrá la de Olabeaga por el escaso espacio existente.

Los técnicos de la JCZ ultiman en estas fechas los detalles técnicos para afectar lo menos posible en la margen izquierda. Sinde reconocía que “habrá que tener más cuidado y afectar lo menos posible en Olabeaga porque en la isla tenemos espacio para trabajar, pero en frente no”.

Trabajo de cirugía

En estos cuatro meses que restan hasta la apertura de la nueva calle y en los posteriores la JCZ tendrá que ejecutar una precisa cirugía urbanística, ya que en esta punta sur confluyen muchos frentes de trabajo, “además de tener en cuenta que se encuentra el único acceso a la isla”, apunta Sinde.

Las reuniones de coordinación van a ser constantes con Neinor, la promotora que ya está cimentando la primera promoción residencial con 80 viviendas y que linda con la nueva calle. En breve también se tratará con otra constructora, Biurban, que entrará en otro solar cercano para levantar otros 33 pisos de precio libre. A ello se une la construcción del depósito subterráneo de aguas de lluvia, conocido como tanque de tormentas, que ya ha iniciado el Ayuntamiento de Bilbao, la misma institución que también va a empezar próximamente a tender el muro de defensa contra las avenidas en la orilla de la ría en Ribera de Deusto.

A eso hay que añadir una sensibilidad especial para intentar evitar cualquier problema a los vecinos de toda la vida de Zorrotzaurre, a los que habrá que afectar en su día a día, por ejemplo, en los espacios para estacionar los vehículos. El director gerente de la JCZ reconocía que 2023 va a ser complicado en esta punta sur de la isla, pero asegura que “vamos a hacer todo lo posible para que las molestias a los vecinos sean las mínimas”.